Tres nuevas reclusas ingresan el mismo día en el centro penitenciario Carlingford: Kelsey, Orla y Abi. Las tres comparten celda y se ven obligadas a afrontar juntas su nueva realidad en un terreno hostil y desconocido. Pero, a pesar de la constante sensación de amenaza y de la violencia que se respira en los pasillos, las tres se hacen fuertes en su mutuo entendimiento y descubren lazos de conexión que no esperaban.