Cansado y agobiado por la rutina de su trabajo, Federico busca un cambio en su vida y en la de sus amigos Mariano y Martín. Federico cree descubrir que una de las mejores vías para lograr dinero rápido es la producción de una película. Y aunque no tiene la menor idea de lo que está hablando, les propone a sus amigos hacer una película de muy bajo presupuesto y esperar a que el público acuda en masa al cine. Su lógica es simple y contundente. Sólo necesitan a una estrella que les asegure una recaudación récord. Ricardo Darín es sin duda su hombre.